
Por Laura Zárate
Estudiante de Medicina URosario
La EPOC es una enfermedad pulmonar progresiva caracterizada por la reducción persistente del flujo de aire. Quienes la sufren, presentan dificultad para respirar, tos, sensación de presión en el pecho, entre otros síntomas. El tabaco, la exposición ocupacional y la contaminación ambiental son los principales factores de riesgo. Además, es una enfermedad causante de una alta morbimortalidad. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el año 2015 murieron 3,17 millones de personas en todo el mundo por esta causa, cifra que representó el 5% de muertes ese año, y en el 2016 hubo una prevalencia de 256 millones de casos.
Por estas razones es importante realizar campañas de promoción como las medidas de espacios libres de humo; así como de prevención dirigidas a toda la población; el diagnóstico precoz de la enfermedad para evitar su progresión, y la creación de grupos de apoyo social y de rehabilitación para las personas que padezcan la enfermedad, y para sus familias. Encontrar medios para ofrecer un mejor camino hacia la recuperación con una calidad de vida, para quienes la sufren, de una manera menos traumática.
El gobierno colombiano en el 2015 creó una estrategia denominada “Tómate la vida con un segundo aire” con el propósito de prevenir y controlar las enfermedades respiratorias crónicas, como la EPOC. Esta estrategia está compuesta por tres líneas de acción las cuales se dirigen a la promoción de la salud respiratoria; la atención integral de los pacientes con enfermedades respiratorias crónicas, y la gestión de vigilancia de estas enfermedades.
Según el Ministerio de Salud y Protección Social, la Organización Mundial de la Salud y Organización Panamericana de la Salud, quienes lideraron la iniciativa, estas acciones tienen como objetivo a hacer intervenciones en los diferentes grupos de vulnerables para disminuir la exposición a factores de riesgo; tener redes de servicios de salud accesible y asequible para todos, y hacer un análisis de la situación en salud de la enfermedad, vigilando su mortalidad, morbilidad, discapacidad, determinantes
Teniendo en cuenta la estrategia se podría decir que Colombia se está interesando por la enfermedad y, por lo tanto, el número de personas enfermas de EPOC podría descender en los próximos años. Pero la realidad es muy diferente. Estos cambios no ocurrirán hasta que se vea como una problemática que debe prevenirse desde la concepción, ya que se ha observado que los hijos de padres que fumaron durante el embarazo nacen con un bajo peso y tienen alta probabilidad de padecer la enfermedad.
En conclusión, y como lo afirman diferentes autores en el artículo “Tendencias y variaciones de área en admisiones potencialmente prevenibles para la EPOC en España (2002–2013):
un declive significativo y convergencia entre áreas”, esta enfermedad es una problemática de salud pública a la cual todos debemos ponerle atención en este momento, sin importar que los resultados solo se pueden evidenciar en diez o doce años.
A partir de la implementación rigurosa de estrategias, como la propuesta en el 2015, tendremos una disminución de su prevalencia y morbimortalidad, por lo que se mejoraría la salud y productividad de las personas y además se reducirán los costos que causa esta enfermedad. Estos recursos podrían destinarse a otros problemas de salud que también son de gran importancia en la actualidad, como la desnutrición, las enfermedades mentales, la obesidad, la diabetes, entre otros.